Bajo la llovizna, mirando las nubes,
pedí a una brisa qué pasó,
que llegué hasta ti, y te de una caricia.
Deseaba ver otra vez, tu intensa mirada
que me dejó marcado el día que te conocí.
Pido a Dios que me permita estar frente a ti,
aunque sea como una estampita,
aunque sea tan solo acariciar tu sombra...
Gracias por mirarme así.
Por ser motivo de mi inspiración,
Y de que me alegre el corazón,
Saber que un día estuve tan cerca de ti.
50 años después...
Otra vez, bajo la llovizna.
Contando con paciencia las gotas
Que caen brillantes por la luz del farol.
Esperando otra vez la brisa que pase,
Para que lleve hasta ti,
lo que no me canso de enviarte.
Cuando te llegue mi abrazo,
cuando te llegue mi beso.
Espero que te lleve mi calor
y pueda yo sentir,
la calidez de tu sonrisa.
0 comentarios:
Publicar un comentario