Miro el Cielo y ahora lo veo más cerca que antes... Levanto mi mano y siento que puedo tocarlo, hoy siento el Cielo muy de cerca, y pensar que en un momento sentía mi espiración muy distante.
Ahora puedo mirar el Sol en toda su fuerza. Ya no me hiere la vista, me expongo al Sol y lo ciento tan cerca.
Gracias Dios por acercarme a tu creación. Por acercarme la Luna, cuando fui a meditar en la playa de noche. Gracias por darme el aire, cuando parecía que ya no daban ganas de respirar. Gracias por las buenas amistades, que siempre estarán allí en todo momento para recordarme que tu eres el mismo de ayer hoy y siempre.
Porque solo tu puedes hacer que mi vida, llegue a ser mucho más que una poesía.
© Por: Gerson Vega
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